Un día tristísimo para Estudiantes de La Plata y para nosotros los hinchas del León. Estamos afuera de la Copa Libertadores, de una forma muy injusta. Fuimos superiores en los 180 minutos, en el primer partido nos llegaron poco y con un gol sobre la hora marcaron la diferencia. En este partido igual, dominamos, jugamos mejor. Cosas que pasan, quizás tendríamos que haber buscado el tercer gol y cerrar la llave. ¡Qué mal que ataja Abbondanzieri!
Nos tiene que servir para aprender varias cosas: por ejemplo no ser tan estúpidos como para tirar bengalas sobre el área de nuestro equipo, no especular tanto (desde los 20 minutos del primer tiempo).
Fue el fin de una etapa, ahora comenzará otra. Se irán varios jugadores y llegarán otros.
Sabella encontrará cosas para corregir.
Nosotros seguiremos alentando al grito de ¡Vamos León!
viernes, 21 de mayo de 2010
El día después
Publicado por Pedro Salas en 8:39
Etiquetas: Copa Libertadores, Estudiantes de La Plata
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